Entre estos contactos infecciosos figuran los animales domésticos y las endotoxinas de las bacterias que los mismos hospedan. Se trata de  saber si el hecho de tener un animal doméstico durante el primer año de vida y haber estado sometido al contacto con éste  aumenta o disminuye el riesgo de enfermedad alérgica.

Los trabajos han dado hasta ahora resultados discordantes.
 Los autores analizaron, entonces, con mayor rigurosidad 26 publicaciones sobre este tema. La conclusión es que el contacto con un perro disminuye el riesgo de dermatitis atópica en un 25 %, mientras que el contacto con un gato no lo modifica. Los autores se abstienen de extrapolar esta conclusión a los consejos prácticos.
En efecto, en lo que concierne al asma, los resultados de metanálisis comparables son diferentes, el perro tiene aquí un rol más nocivo (Takkouche B et al., 2008). Finalmente, destacará que la influencia de los animales domésticos sobre las enfermedades atópicas no es atribuible a una alergia a sus faneras, como se decía antiguamente, pero sí al contacto con su microbioma, especialmente digestivo.
Pet exposure and risk of atopic dermatitis at the pediatric age: a meta-analysis of birth cohort studies.
Pelucchi C, Galeone C, Bach JF, La Vecchia C, Chatenoud L 
J Allergy Clin Immunol Sep;132(3):616-622.e7.doi:10.10Manifestaciones cutáneas de las terapias dirigidas anticancerosas
Dr Caroline Robert (Institut Gustave Roussy – Villejuif, France)
Publicado el : 22-08-11 – Puesta al día : 22-08-11